Por Alejandro Jurado
Necesitaría muchas líneas y mucho tiempo para contar en profundidad las intensas 48 horas vividas en el sí de la familia del Fisiomedia Manacor, me han hecho sentir como uno más de la expedición, facilitándome el trabajo en todo momento.
Por tanto, antes de seguir, GRACIAS, muchas gracias a todos ellos. Desde el Presidente, Miquel Jaume, el director deportivo José Tirado, el entrenador, “Pato”, el capitán, Toñete y los responsables de prensa, Pedro y Emma, y como no también a IB3 Radio, que una vez más ha apostado por el deporte balear, por el Fisomedia Manacor, en una cita histórica, y gracias a ello he tenido el privilegio de poder vivir esta experiencia en primera persona.
Tras llegar el miércoles a Barajas nos desplazamos por carretera hasta Segovia, allí en el mismo autocar, el capitán Toñete, reúne a sus jugadores y les hace partícipes del ritmo que seguirán a partir del momento de la llegada al hotel de concentración, el lujosísimo hotel Cándido. Una vez allí, al filo de las 15 horas y tras compartir almuerzo con la plantilla del Fisiomedia, toca conocer más a fondo la Ciudad, cubierta en algunas zonas, de un fino manto de nieve.
El entreno del miércoles en el pabellón Pedro Delgado fue muy intenso y emocionante, era la primera ocasión que entrábamos en el recinto deportivo donde 24 horas más tarde nos estaríamos jugando el pase a la semifinales contra uno de los mejores equipos del mundo.
Y llegó el jueves, el reloj de la Plaza Mayor de Segovia marcaba el medio día, entonces comenzaba el acto de presentación oficial, no faltaba nadie, allí estaban los presidentes de los 8 clubes participantes, el Alcalde de Segovia, representantes políticos llegados de muchos puntos de España, y como no, D. Javier Lozano, Presidente de la LNFS. Fue lo más cerca que estuvimos de la Copa, la vimos, la miramos, la sentíamos cerca, soñamos por un momento poder traerla a Mallorca el próximo domingo, y es que amigos, ya sabéis, al fin y al cabo, los sueños, sueños son… Como ilustra la imagen no pude resistirme a inmortalizar el momento, el Presidente Miquel Jaume y un servidor junto al ansiado trofeo, la Copa de España!
Todo cambió horas después, el duelo se instalaba en las 12 habitaciones de la expedición mallorquina del hotel Cándido al conocer la fatal noticia del fallecimiento del padre de Paulinho, raudos y veloces los jugadores se personaban en el hall, allí comentaban lo sucedido, las caras eran un poema, todos esperaban a su amigo y compañero para acompañarle en esos difíciles momentos, fue allí cuando empecé a percibir que el sueño de la Copa ya no podría hacerse realidad. Con ese estado de ánimo es casi imposible saltar a la pista con la actitud necesaria para doblegar a unos de los mejores equipos del mundo.
Pero Paulinho decidió jugar- La organización se negó a guardar el protocolario minuto de silencio alegando inconvenientes televisivos, siempre la televisión. Ante la imposibilidad de viajar en esos momentos hasta Brasil, el carioca, dijo que se quedaba y jugaba, estuvo a la altura, como lo que es, un gran profesional, eso si, el minuto de silencio se guardó en la más estricta intimidad del santuario del deportista, el vestuario del Fisiomedia se fundió en una solo sentimiento minutos antes de comenzar el partido.
Sea como fuere, el resultado ya era lo de menos, un equipo de las Islas Baleares, de Mallorca y de Manacor, seguía haciendo historia. Viva el deporte, viva el fútbol sala, viva el Fisiomedia Manacor.
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