Germán Lux, el día que contrajo matrimonio en el Castillo de Bellver de Palma. Mallorca le ha devuelto parte de la felicidad familiar perdida años atrás. Catalina Cirer, gran mallorquinista, ofició la ceremonia.
Por Alejandro Jurado
El 21 de enero de 2006 se paró el mundo para esta gran persona, para este gran deportista, contaba tan sólo 23 años y estaba realizando el calentamiento en el estadio Monumental de Buenos Aires para el partido amistoso que iba a enfrentar a River Plate contra los Defensores del Belgrano, fue entonces cuando su técnico, el argentino Daniel Pasarella se acercó a “Poroto” y le comunicó la fatal noticia.
La recibió vestido de corto, sobre un terreno de juego y con sus guantes de arquero enfundados. Su hermano Pablo, de 26 años, acababa de fallecer, se había suicidado, en Carcarañá, lugar de procedencia de los Lux.
Hasta entonces Germán era el portero titular indiscutible defendiendo la portería de River Plate y de la Selección Argentina. Con River fue campeón del torneo Clausura los años 2002, 2003 y 2004, con la Selección Albiceleste fue campeón del mundo sub-20 en 2001 y campeón olímpico en Atenas 2004, manteniendo la portería de Argentina imbatida durante todo el campeonato.
En 2006 y a raiz del fallecimento de su hermano, bajó notablemente el rendimiento de Germán lo que propició que quedara fuera de la convocatoria para el mundial de Alemania.
Ya en 2007 llegó a Mallorca para intentar arrebatarle la titularidad a Miquel Àngel Moyà y a partir de aquí la historia reciente de Germán Lux es por todos conocida, pero no igual de entendída por unos que por otros.
Es evidente que cuando uno habla o escribe de sus amigos, de las personas a las que quiere y por las que siente afecto, pierde esa objetividad que nunca un buen profesional debería dejar al margen, pero ante lo ocurrido el pasado jueves en Son Moix uno no puede quedar indiferente, es cierto que damos quizás más importancia de la debida a los gritos de una minoría, cuando en realidad la afición del Mallorca está muy por encima de estas actuaciones.
El 23 de enero de 2010, hace ahora casi un año, la expedición del Mallorca se trasladaba a Barcelona para enfrentarse al Espanyol, apenas 4 días antes de enfrentarse al Getafe por un puesto en las Semifinales de Copa. Gregorio Manzano decidió revolucionar aquel equipo e introdujo hasta 6 cambios en el once titular, todo ello pensando en el partido de Copa. Ese sábado 23 en el mismísimo aeropuerto del Prat, me comunican que Manzano ya tenía decidido sacrificar a Lux en el partido de Copa, el técnico jienense habría recibido ciertas presiones por parte de algunos "barones" del equipo. Todo hacía indicar pues, que Lux, formaría parte de aquellas rotaciones y jugaría en Cornellà, pero no fue así, Manzano introdujo 6 cambios y el Mallorca empató a uno merced a un gol de Borja de penalti.
El Miércoles 27 de enero, en Son Bibiloni, en el último entrenamiento antes de viajar el jueves a Madrid, Manzano ensaya con los teóricos titulares, reparte petos, y Lux que nada sabía de lo que iba a pasar porque decidí guardar silencio para no perjudicarle, también recibió el peto de titular, Manzano ordenó ensayar tandas de penaltis y bajo palos situó a Germán Lux, hasta ahí todo normal para el portero argentino. Pero la gran mayoría del vestuario estaba a punto de quedar estupefacta, más que sorprendida, cuando tras el entrenamiento y ya en el vestuario el entrenador escribió en la pizarra el equipo titular que iba a enfrentarse al Getafe por un pueso en las Semifinales coperas, y en ese equipo, como sabéis, no estubo Germán Lux, el mundo se le vino encima, sus amigos y compañeros, Castro, Pezzolano, y otros tuvieron que consolarle, pero Lux, abandonó a toda prisa las instalaciones de la Ciudad Deportiva, no quería ver ni escuchar a nadie.
Se acababa de cumplir lo que algunos ya sabíamos 4 días antes, los “barones” habían ganado la partida, Manzano dobló su rodilla, agachó la cabeza y actuó al dictado de algunos…
El día 28 el Mallorca viaja a Madrid el mismo día para enfrentarse al Getafe, circunstancias de la vida, Manzano y Lux, han de sentarse juntos en el avión que les lleva a Madrid, en ese momento Lux ya es conocedor de que la decisión sobre su suplencia estaba tomada muchos días antes y también conocía quiénes intervinieron en dicha decisión. Ni una palabra, ni un saludo, ni un gesto, entre el entrenador y el portero que se sentía traicionado.
Llegó el partido, el Mallorca no consiguió la clasificación para las semifinales, Aritz Aduriz falló un penalti que hubiera supuesto directamente el billete a la penúltima ronda copera. Un año antes, en Son Moix, otro penalti, otro fallo, en esta ocasión de Pep Lluís Martí, privaba al Mallorca de estar en la final de la Copa del Rey, y con ello, con el fallo de Martí, se propició la más gloriosa época en cuanto a títulos ganados se refiere, del FC Barcelona.
Por tanto, y en resumen, el Mallorca cayó eliminado de la Copa del Rey en 2008 y en 2009 gracias a los fallos en lanzamiento desde los 11 metros, primero de Martí y luego de Aduriz, ni una crítica, ni una voz más alta que otra contra ellos. Lux no jugó en Getafe y el Mallorca cayó eliminado. Pero como sabiamente dijo el portero argentino el pasado jueves, “la culpa siempre es para el arquero o para el técnico”.
Vaya desde aquí mi reconocimiento a un gran portero como Dudú Aouate, poco o nada tiene que ver él en esto. Y claro está, contra las estadísticas no se puede luchar. Y los número del Mallorca con Lux, son los que son.
Germán Lux, rechazó el pasado verano una oferta de renovación por parte del Mallorca, tenía ofertas de otros clubes de nuestra liga y también de Italia, pero decidió apostar un año más por el Mallorca y acabar su contrato, lo que si hizo por el bien del club y de la institución, fue un sacrificio personal, bajarse el sueldo, renunciar a parte de su salario para aportar su granito de arena en la viabilidad económica del Mallorca, eso nunca se le ha agradecido y son muy pocos lo que pueden presumir de ello. El próximo 30 de junio pondrá fin a una etapa de su vida. En la anterior, perdió a un hermano, en esta, ha visto nacer a su retoño, el pequeño mallorquín Tomás Lux, ha colmado de felicidad y alegría el hogar del “Poroto”
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